Sunday, October 07, 2007
Carmageddon (parte I)
Creo que siempre me llamaron la atención las cosas inocentes que despiertan reacciones negativas e irracionales en las personas.
Hoy por ejemplo, leyendo un comic de "La Liga de la Justicia" que se llama "Armageddon 2001", me acordé de las clases de fonética del profesor Langwich y eso me hizo traer a la memoria el juego de video Carmageddon (de aquí el título), en el cual uno sumaba puntos a medida que iba atropeyando transeúntes con su auto. Inmediatamente hice un salto elíptico (de los que todavía no se consideran como deporte olímpico, pero vaya que hay saltos elípticos altos y largos) y relacioné la aparición de esta temática en los juegos con el tan conocido "Counter-strike" y toda la familia de este tipo de juegos en el que uno es o bien un militar, o bien un terrorista, o bien un 'símil ambos', pero siempre siempre siempre es un pistolero, y a mejor pistola, con mayor entusiasmo y admiración se oyen los gritos de los chicos (y a veces de grandes también) en los cibers.
En fin. No se a cuento de qué venía esta nueva entrada del blog.
Me parece que volví a batir el récord en salto elíptico mental hacia el presente continuo...
... qué lástima.
Hoy por ejemplo, leyendo un comic de "La Liga de la Justicia" que se llama "Armageddon 2001", me acordé de las clases de fonética del profesor Langwich y eso me hizo traer a la memoria el juego de video Carmageddon (de aquí el título), en el cual uno sumaba puntos a medida que iba atropeyando transeúntes con su auto. Inmediatamente hice un salto elíptico (de los que todavía no se consideran como deporte olímpico, pero vaya que hay saltos elípticos altos y largos) y relacioné la aparición de esta temática en los juegos con el tan conocido "Counter-strike" y toda la familia de este tipo de juegos en el que uno es o bien un militar, o bien un terrorista, o bien un 'símil ambos', pero siempre siempre siempre es un pistolero, y a mejor pistola, con mayor entusiasmo y admiración se oyen los gritos de los chicos (y a veces de grandes también) en los cibers.
En fin. No se a cuento de qué venía esta nueva entrada del blog.
Me parece que volví a batir el récord en salto elíptico mental hacia el presente continuo...
... qué lástima.